Con sus paredes coloridas y vibrantes detalles que nos llevan a México, puedo ver al fondo, en una cocina abierta, a Romina Sánchez, cocinando la experiencia de una emocionante comida que tiene la misión de hacerte descubrir, el esplendor y color de una cocina ‘de tradición mexicana’.
El restaurante de esta crónica cuenta con una cómoda terraza, pero si las medidas sanitarias impuestas al sector restauración lo permiten; la mejor posición está sobre un taburete, en su interior, con una jarra de sabrosa margarita elaborada al momento especialmente para ti y de fondo musical, parece que te canta al oido José Alfredo Jimenez, Armando Manzanero o Agustín Lara con su noche de ronda.
Y aquí comienza esta ‘sabrosa’ historia que huele a tortillas recién hechas, a chiles cocinándose directamente sobre el fuego, a carnitas ¡y a tequila!…
Los Chiles en Nogada es uno de los platos más queridos de México. Desde su nacimiento en 1821, año de la consolidación de la independencia, representa una propuesta clave de la cocina mexicana.
Como todas las recetas, cambian según las regiones ¡hay miles! y su preparación depende de la individualidad de cada persona; pero se cree que surgió de diferentes recetas familiares del estado de Puebla y posteriormente, convergieron en una versión que comparte las técnicas e ingredientes base que forman la bandera de México: la nuez de castilla (Nogal) para representar el blanco, la granada de corona para representar el rojo y para el verde, el chile poblano.
Chiles rellenos de picadillo de frutas, picada de cerdo y res, bañados con una salsa hecha a base de nuez que culmina con granos de granada. Para mí, es la estrella de un ‘fuera de carta’ del restaurante de cocina tradicional mexicana ‘El Chile Verde’, ubicado en Santa Úrsula; que aúna variedad de sabores y texturas a la perfección.
El frenesí mexicano continúa en este ‘pequeño’ espacio lleno de encanto, una pequeña cantina al estilo mexicano que irrumpió en la escena gastronómica con una propuesta de tradición todopoderosa. En la cocina está Romina Sánchez, natural de Guadalajara, poniendo en buen nombre la cocina de su país que elabora según la tradición, para llevarte a un viaje a través de su memoria.
Antes de quedarnos ‘rendidos’ a los pies del Chile en Nogada, decidimos pedir uno de los tacos que nos faltaba por probar ‘el Placero’, tortilla de maíz, chicharrones y queso, acompañado de su guacamole -siempre fresco- elaborado por el equipo de cocina. Diferente al resto de tacos que conocía hasta ahora por la sencillez de sus sabores. Del Chile Verde, en lo que a tacos se refiere, me quedo con el sabor y combinación de taco ‘Al Pastor’.
La margarita es la bebida de las vacaciones y el sol. Un acto de equilibrio entre lo agridulce y el suave toque del tequila. La clave para una margarita realmente bueno es usar un tequila de calidad y en esta casa, se le rinde el debido respeto sirviéndolo en un jarra, perfecta para acompañar durante toda la velada.
Para cerrar con los platos fuertes, nos inclinamos por una ‘Enchilada Vallarta’ que debilita las rodillas . Este plato que tiene su origen en la época maya, se puede considerar como uno de los principales antojos en la cocina mexicana.‘ Tortillas de trigo, pollo, queso, salsa de nata con maíz y chiplote’, perfectamente ejecutada y gratinada. Una combinación de ostentación de la gran ciudad y lo básico del interior del país encaja perfectamente en el espíritu gastronómico de una chef con el corazón en México y los pies en Tenerife, consolidando la reputación del Chile Verde, como uno de los mejores ‘ranchos’ de comida tradicional y herencia mexicana.
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